Reuniones espíritas – Para el comienzo
Rogamos al Señor Dios Todopoderoso que nos envíe Espíritus buenos para asistirnos, aleje a los que podrían inducirnos al error, y nos conceda la lucidez necesaria para que distingamos la verdad de la impostura. Aparta también, Señor, a los Espíritus malévolos, encarnados o desencarnados, que intentan sembrar la discordia entre nosotros y desviarnos de la caridad y del amor al prójimo. Si algunos de ellos pretenden introducirse aquí, haz que no encuentren acceso en el corazón de ninguno de nosotros. Espíritus buenos, que os dignáis venir a instruirnos, hacednos dóciles a vuestros consejos, desviad de nosotros toda idea de egoísmo, orgullo, envidia y celos; inspiradnos indulgencia y benevolencia para con nuestros semejantes, presentes o ausentes, amigos o enemigos; haced, en definitiva, que por los sentimientos con que estamos animados, reconozcamos vuestra saludable influencia. Infundid a los médiums, a quienes escogisteis para transmitir vuestras enseñanzas, la conciencia de la santidad del mandato que se les confía y de la seriedad del acto que van a cumplir, a fin de que lo hagan con el fervor y el recogimiento necesarios. Si en esta reunión se encuentran personas que han venido atraídas por  otros sentimientos que no son los del bien, abrid sus ojos a la luz, y perdonadlas, como nosotros las perdonamos si vinieron con malas intenciones. Rogamos especialmente al Espíritu de nuestro hermano, nuestro guía espiritual, que nos asista y vele por nosotros.