Acción de gracias por un favor concedido a otro
Dios mío, bendito seas por la felicidad que has concedido a nuestro hermano. Espíritus buenos, haced que él vea en esa felicidad un efecto de la bondad de Dios. Si el bien que se le concede es una prueba, inspiradlo para que haga de él un buen uso, y no para que se envanezca, a fin de que ese bien no llegue a resultarle perjudicial en el porvenir. A ti, genio bueno que me proteges y deseas mi felicidad, aleja de mi corazón todo sentimiento de envidia o de celos.